fbpx

Ser la mamá de Andrea (18 años ) y Dana (11 años) ha sido uno de los más grandes regalos que Dios nos ha dado a su papá y a mí. Cada día mis ojos se iluminan al verlas, tan llenas de vida, tan alegres, las escucho reír y mi corazón se desborda de amor. Sin embargo esto no quiere decir que no hayan habido retos en el camino ( y que los siga habiendo).

En un mundo tan cambiante, donde abunda la información y la desinformación, donde a causa de la cantidad ilimitada de distractores resulta cada vez más difícil mantenerse conectado al corazón de tus hijos, es necesario estar alertas y buscar a toda costa guardar sus mentes y sus corazones.

La adolescencia y preadolescencia presentan un gran reto para nosotros como padres pues es una etapa de cambios, donde nuestros hijos desafían los límites y las reglas. Me gustaría compartir 4 claves que me han ayudado a navegar estas etapas de la mejor manera:

  1. CONSTANCIA. Oración constante por mis hijas. Aunque como típica mamá, me esfuerzo por tener el control de todo, he aprendido que no hay herramienta más poderosa que la oración para cambiar las cosas que deben cambiar tanto en mi como en ellas.
  2. PAZ. Buscar paz y guía en Dios y en Su palabra. Es cierto que puede haber momentos, días ( o meses jaja) en que no encontramos paz y que no sabemos cómo manejar algún tema o circunstancia con nuestros hijos, pero es ahí donde el mejor lugar para correr a buscar guía es con Aquel que los conoce aún mejor que nosotros, con Su Creador, con nuestro Padre.
  3. UNIDAD. Estar en un mismo sentir y un mismo pensar papá y mamá. Dice la Palabra que una casa dividida contra sí misma no puede permanecer y aplica igual para los hijos, cuando ellos ven que papá y mamá no se ponen de acuerdo, crea confusión e inseguridad en ellos.
  4. CONEXIÓN. Tratar de ser empática con mis hijas. ¡Que rápido olvidamos que nosotros también fuimos niños, adolescentes y jóvenes! Debo admitir que mi forma de educar a mi primer hija fue muy rígida y exigente en un inicio; agradezco que Dios me mostró a tiempo el daño que podía dejar en ella si yo no cambiaba mi actitud. El entender que ellas están descubriendo el mundo, conociéndose a sí mismas y teniendo su propia relación con Dios me ha ayudado a ser más empática con ellas.

Y por último, pero creo que lo más importante, ha sido tratar de vivir lo que predicamos, que el centro de nuestra familia sea Dios y que en todo tiempo esté presente: en nuestras pláticas en el carro, en la sobremesa, cuando algo sale bien, cuando algo sale mal, que ellas puedan descubrir a Cristo siempre presente en sus vidas.

Deuteronomio 6:7-9 Repíteselos a tus hijos una y otra vez. Habla de ellos en tus conversaciones cuando estés en tu casa y cuando vayas por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes. Átalos a tus manos y llévalos sobre la frente como un recordatorio.  Escríbelos en los marcos de la entrada de tu casa y sobre las puertas de la ciudad

Te puede interesar

¿Cómo no avergonzar a nuestro preadolescente?

¿Cómo no avergonzar a nuestro preadolescente?

Familia¿Cómo no avergonzar a nuestro preadolescente?Creo que los padres avergonzarán a sus hijos adolescentes, pero no creo que tenga que ser terrible. Creo que los padres perpetuamos esta idea de que tus hijos adolescentes te van a odiar. Muchos padres me dijeron eso...

¿Estás preparado para la temporada navideña?

¿Estás preparado para la temporada navideña?

Familia¿Estás preparado para la temporada navideña?Para muchos de nosotros, la temporada navideña es un momento que se anticipa con alegría y ansiedad. Claro, amamos las celebraciones, las tradiciones familiares y apreciamos los recuerdos de las fiestas pasadas; pero...

¿Y si esta fuera tu última Navidad?

¿Y si esta fuera tu última Navidad?

Familia¿Y si esta fuera tu última Navidad?¿Qué pasaría si supieras que esta Navidad sería tu última Navidad? Lo sé, lo sé, no es algo divertido en lo que pensar. Fue la víspera de Navidad, hace dos años, cuando mi difunta esposa y yo nos sentamos juntos en una cama de...

¿Cómo ayudar a mi preadolescente a ser valiente?

¿Cómo ayudar a mi preadolescente a ser valiente?

Familia¿Cómo ayudar a mi preadolescente a ser valiente? Cuando escuchamos la palabra valentía, a menudo pensamos en estos grandiosos momentos de valentía. Experiencias como saltar desde un trampolín alto, participar en un equipo ultracompetitivo o dar el primer paso...

Share This