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Resurgiendo del Fracaso
Matrimonial

Josué Zatarain y Eduardo Navarro | 7 septiembre 2020 | Hombres Escala

Comenzamos reconociendo nuestra condición al entrar en una relación o incluso estando en ella.

Es importante que vuelvas al diseño original que Dios te puso para estar a la altura o tener la madurez adecuada en cuanto a una relación de pareja. Toma un tiempo para conocer a tu esposa, un tiempo en donde puedas entrar en intimidad en el corazón de ella para alegrarlo.

Enemigos de un matrimonio sano:

1. Las distracciones: en muchas ocasiones las distracciones vienen disfrazadas de lo que creemos que no es importante o dañino para nuestra relación, es decir, redes sociales, exceso de trabajo, televisión, entre otras cosas.

2. El orgullo: dejas que el orgullo le gane a tu relación cuando no aceptas o reconoces que fallas y te cuesta pedir perdón.

3. La falta de extender gracia: te enojas o molestas por que tu pareja no hace las cosas o actúa de la manera que tu quieres que lo haga. Es importante que tu sigas dando lo mejor de ti y sigas amando a tu pareja de manera incondicional.

En muchas ocasiones podrás sentir que no hay solución o salida a los problemas que ocurren en tu matrimonio, pero creemos que con ayuda de Dios todo es posible y se puede resurgir.

¿Cómo resurgir después de un fracaso matrimonial?

1. Estar dispuesto y determinado a que funcione: tienes que disponer a tu corazón a hacerlo funcionar, enamorar a tu pareja, sorprender a tu pareja en todos los sentidos.

2. Dejar el egoísmo a un lado: entrégate a tu pareja por completo y echa fuera ese egoísmo de tu pareja, reconéctate con tu esposa.

3. Entender que el matrimonio es algo para siempre: en el matrimonio no hay expiración o tiempo de caducidad, disfruta cada momento con tu pareja y haz valer cada momento.

“Cuando tu pareja ve en ti que estás dispuesto o determinado a permanecer en el matrimonio, creas una mayor conexión con ella”.

4- No desistir en los momentos de conflicto: busca la solución al problema, comunícate con tu pareja y en unión fortalezcan su relación de pareja.

La actitud hace a diferencia, creer que no habrá dificultades en el matrimonio es cerrarte los ojos a ti mismo, pero afrontar esos problemas con una actitud correcta es lo que te llevará a mejores oportunidades en tu vida para crecer.

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