Entre el trabajo, el esposo, hijos y mi servicio a Dios he dejado en muchas ocasiones mi gusto o necesidad de actividad física a un lado, bueno no tan a un lado más bien atrás, muy atrás. Así era mi vida hasta que encontré una manera muy divertida de disfrutarme, hace un par de años gracias a una amiga, el senderismo.

El senderismo es una actividad física que consiste en caminar en senderos poco transitados o subir veredas entre los cerros. La intensidad de este deporte puede variar desde ser caminatas cortas y fáciles hasta extremas, durar días enteros caminando y terminar exhausta. Esta actividad física se volvió muy importante para mí desde la primavera del 2018.

Para los que no saben a lo que me dedico, yo soy maestra de educación primaria. A lo largo de mi carrera he trabajado tanto en educación especial, como en educación regular bilingüe. Amo trabajar con esas pequeñas personitas tan bien definidas que aportan su carisma como su inteligencia en el salón de clases. En el lugar donde trabajo, decidieron encomendarme un salón que necesitaba de mi apoyo y estructura, y la verdad que me encantó el reto. Poco a poco fui descubriendo las personalidades y gustos de mis estudiantes hasta establecer una relación de cariño y respeto con ellos y sus familias. Bueno, al menos eso es lo que yo creía. En el 2018, se levanta una investigación que pone en tela de juicio mi amor y dedicación hacia la enseñanza. En ese momento sentí como si me hubieran aventado un balde de agua helada. Ni más ni menos que me hicieron el bucket challenge sin mi autorización, ni previo aviso.

¿Cómo a mí? ¡Yo! que ayude a formar un ministerio nuevo para niños con necesidades especiales. ¡Yo! que daba clases a pequeños, inclusive hasta los domingos?! Y la progresión natural de nuestros pensamientos es ¿Por qué me está pasando esto? Aunque la forma madura y más eficiente de pensar viene después ¿Para qué mi Dios?

El chisme y la calumnia es una de las formas más viles que puedes hacer para lastimar a una persona. ¿Porque lo pienso así? Porque puede llegar a marcar tu reputación tanto laboral o personal de por vida. Aunque no existan pruebas de lo que se dijo, esa semillita mal intencionada puede formar raíces en los pensamientos y corazones de los demás sin que la persona involucrada pueda hacer nada al respecto.

A través de este proceso que viví, aprendí muchas cosas que hoy quiero compartir contigo. Cuando vayas y practiques senderismo, asegúrate de elegir el calzado adecuado, si vas a caminar un sendero llévate unos tenis de “hike” que son más ligeros, pero si vas a subir una montaña rocosa, asegúrate de llevar unas botas que te mantengan muy seguros los tobillos. Mi calzado adecuado para éste y todos mis procesos de vida es y siempre será la lectura diaria de la palabra de Dios.

Romanos 12:2 No se amolden al mundo actual, sino sean transformados mediante la renovación de su mente. Así podrán comprobar cuál es la voluntad de Dios, buena, agradable y perfecta. 

 En mis momentos de angustia de ¿cómo voy a demostrarle a alguien el amor y la dedicación hacia mi trabajo y los peques? En mis momentos de llanto y desesperación, el escuchar su voz por medio de la lectura de la biblia o escuchar alabanzas era un bálsamo que acariciaba mi corazón. Yo sabía que Dios estaba conmigo en este proceso, pero me dolía ser cuestionada y difamada.

Al practicar senderismo, necesitas enfocarte en las rocas que están frente de ti. No puedes desviar tu vista del camino, pues te puedes tropezar con alguna piedra o frotar tu mano en alguna hiedra venenosa. Así que me mantenía enfocada en sus promesas y su palabra. En una ocasión después de estar clamando a Dios en oración al llegar a casa, me llama una amiga y me dice que sintió en su corazón hablarme y hacer algo por mí. Me llama para decirme lo mucho que me quiere y que se ha sentido apoyada por mí en el proceso de cambio de educación regular a educación especial de su hijo. Quedé tan sorprendida y emocionada de ver la mano de Dios verse manifestada en los labios de ella y pude ver mis suplicas contestadas.

Jeremías 33:3 Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces.

Y mi último consejo es: lleva en tu mochila todo lo que vas a ocupar pues cada camino es muy diferente. Lleva palos de hike, agua, comida, celular cargado y tu kit de primeros auxilios. Tu esposo, amigos, y familia serán tus mejores aliados durante los valles o procesos difíciles.

En ellos te apoyaras cuando necesites consuelo. La familia se puede ver manifestada de tantas maneras. ¿Eres parte de un grupo de mujeres que están listas para apoyarte, comoAurora mujeres? Recuerda lo siguiente:
Uno solo puede ser vencido, pero dos pueden resistir. ¡La cuerda de tres hilos no se rompe fácilmente! Eclesiastés 4:12

Y después de tanto esfuerzo, sacrificio, lucha y sufrimiento; podrás ver desde la cima que a través de este proceso que pasaste Dios siempre estuvo contigo. A través de su palabra, las alabanzas, los árboles, los pájaros y las personas que estuvieron a tu lado serán un recordatorio de ello. Eres amada recuérdalo siempre.

Disfruta el camino y la vista en la cima de la montaña, que es maravillosa.